EL TERRENO, AMBITO GEOGRAFICO Y CLIMA

El terreno se halla en la ladera de la sierra descendiendo en terrazas donde hay plantados cerca de 250 olivos.La orientación es sur y estamos a unos 560 metros sobre el nivel del mar. Tenemos un clima suave con una pluviosidad media en los últimos diez años de 1300 mm. Las lluvias concentran sus máximos en el otoño e invierno y los veranos son calurosos y secos. Creo es importante determinar estos aspectos pues de ellos dependerá las labores a realizar y en el tiempo que hay que hacerlas. Mi intención será comentarlas de acuerdo a como las vayamos realizando.

EL SUELO

Es importante tener en cuenta a la hora de iniciar un huerto el tipo de suelo. En mi caso el suelo es arcilloso y por lo tanto muy pesado y difícil de trabajar. Lo ideal es aportar compost y estiércol suficiente para mejorar su estructura a la par que los nutrientes necesarios para el buen desarrollo de las plantas.

El suelo arcilloso presenta, por otro lado, cualidades interesantes (no todo iba a ser malo) fija mejor los nutrientes y conserva mejor la humedad.

Para mejorar la estructura del suelo y al objeto de ahorrar costes en compost (no soy todavía autosuficiente) aporto arena, evidentemente no dejo de echar compost pero lo hago en menores cantidades.La arena no aporta nutrientes pero mejora la estructura del suelo y luego es más fácil de trabajar la tierra (no se compacta ).

jueves, 9 de junio de 2011

HUERTO- -ACELGA

La Acelga

Creo que no hay planta mas dura y rústica que la acelga, ya que lo soporta todo, o casi.

Suelo sembrarla a finales del invierno, de asiento, vamos, que pongo las semillas directamente en la tierra. Como la semilla es un grumo (cúmulo de semillas), nacen más plantas de las deseadas, por lo que tenemos que aclarar. Yo las dejo muy juntas, menos de diez centímetros entre plantas.


En la rotación, siguen a las cebollas.

Como en la Comarca de la Vera solemos tener periodos muy largos sin lluvia en el verano, no nos queda mas remedio que regar. También mantengo el suelo sin hierbas que puedan hacerle competencia.


Se recolectan las hojas a medida que las necesitemos y tengan tamaño adecuado ( unos veinte centímetros ).

Cuando en el otoño empieza a refrescar (noviembre), arranco las plantas que aún queden y las traslado a un bancal secundario, quedando el bancal libre para las tareas de la siguiente campaña.

Prueba de su rusticidad es que aún comeremos algunas hojas mas , antes de arrancarlas definitivamente y dárselas a las gallinas, como las de la foto inferior, que son las últimas que nos quedan del año pasado, y coinciden con los primeros zapallitos y zanahorias de la temporada.

1 comentario:

  1. Se nota la voz de la experiencia. Las entradas de Alex son didacticas y sabias.

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